El término menopausia se define como el día en que la mujer tiene su última menstruación.
A partir de los 45 años (aproximadamente) la mujer comienza a tener cambios en preparación a la menopausia, el organismo entra en el periodo de climaterio; los ovarios poco a poco dejan de producir óvulos y el cuerpo experimenta importantes cambios hormonales por un largo tiempo.
Cada mujer responde de distinta manera ante éstos cambios, pero en todas la dieta ocupa un papel fundamental en la disminución y prevención de malestares.
Cada mujer responde de distinta manera ante éstos cambios, pero en todas la dieta ocupa un papel fundamental en la disminución y prevención de malestares.
Fracturas.
- Consume alimentos ricos en calcio como lácteos descremados, charales, boquerones, queso de canasto, tortilla de maíz nixtamalizada y amaranto.
- La vitamina D interviene en la absorción y metabolismo de calcio. Está presente en leche fortificada y cereales, salmón, aceite de hígado de bacalao, y otros alimentos adicionados.
- Realiza ejercicio físico regular, principalmente aquel que implica cargar el peso del cuerpo, como caminar.
Estreñimiento.
- Aumenta el consumo de fibra a través de cereales integrales, verduras, frutas y leguminosas.
- Prefiere las verduras y frutas crudas y con cáscara.
- Bebe por lo menos 10 vasos con agua simple.
- Realiza al menos seis comidas por día, así acelerarás tu metabolismo.
Acumulación de tejido graso.
- Reduce el consumo de alimentos ricos en grasa saturada. Ésta proviene principalmente de alimentos de origen animal, comida paquetito y productos de pastelería. Reduce el consumo de azúcar.
- Incrementa tu actividad física.
Riesgo cardiovascular.
- Incluye ácidos grasos saludables para el corazón como nueces, semillas y pescados como atún, sardinas y salmón. Evita alimentos muy salados y condimentados.
- Prefiere alimentos ricos en proteínas de origen vegetal como soya, fríjol, haba, lenteja o garbanzo.
- Realiza por lo menos 30 minutos de actividad física.
Mal humor.
- Reduce el consumo de bebidas alcohólicas y café.
- Disminuye o elimina el tabaco.
- Báñate de endorfinas. Aumenta tu actividad física.
- Consulta con tu ginecólogo sobre el manejo farmacológico para aminorar los síntomas.
Con una dieta correcta, ejercicio regular, y sobretodo buena actitud, estos malestares lograrán reducirse en gran medida. Y recuerda que “Somos lo que comemos vs. lo que gastamos”.
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